Eligiendo el vegetarianismo como modo de vida

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Como ya se sabe, a día de hoy, muchas personas optan por la alimentación vegetariana, por varios motivos, pero el más resaltado es el respeto por los animales. Por ello, las personas que eligen este tipo de alimentación consumen única y exclusivamente frutas y verduras.

Se sabe que el vegetarianismo está en auge y que cada vez se ve más en nuestro día a día, incluso ya existen restaurantes que ofrecen, exclusivamente, este tipo de alimentación, pero…

¿Se conocen los orígenes del vegetarianismo?

¿Se sabe realmente cuántos tipos de dietas vegetarianas existen?

¿Cuáles son las principales características de una dieta vegetariana equilibrada?

Los orígenes del vegetarianismo

El vegetarianismo se cree que es una tendencia reciente de los últimos años, pero lo cierto es que tiene su origen en el año 1847, cuando en Inglaterra se establece la primera Sociedad Vegetariana (Vegetarian Society), llegando años más tarde a Estados Unidos y Alemania, en 1903 a España y ya a mediados de los 80 se funda la Unión Vegetariana Europea.

El vegetarianismo está muy relacionado con el veganismo, ya que ambos comparten muchas ideas a la hora de consumir materias primas, principalmente la de no comer alimentos de origen animal, incluso el veganismo va un paso más allá, llegando a excluir productos textiles o cosméticos que sean de origen animal.

Con el paso del tiempo, cada vez se ha dado más reconocimiento e importancia al mundo vegetariano y vegano, eligiéndolo la población como un estilo de vida, por lo que podemos corroborar que el vegetarianismo, desde su origen en 1847 hasta la actualidad, ha estado en constante desarrollo, cambio y crecimiento para llegar hasta lo que es ahora: un hábito convertido en una tendencia social que supone un cambio de mentalidad en todos los sentidos.

Los tipos de dieta vegetariana

Como ya comentábamos en el apartado anterior, el vegetarianismo ha crecido tanto a lo largo de los años y se ha vuelto tan importante para la vida de las personas que optan por esta alimentación, que en la actualidad existen distintos tipos de dietas vegetarianas.

No todas las personas están interesadas en llevar al extremo la dieta, sino que optan por otro tipo de alimentación, también saludable, que a su juicio es mejor y más satisfactoria en muchos sentidos. También se pueden entender estas dietas como un tránsito, más pausado, hacia una alimentación vegetariana 100%. Los tipos de dietas vegetarianas a los que se hace referencia son:

  • Semivegetariana: también conocida con el nombre de dieta flexitariana, persigue un patrón de alimentación dirigido a todas las personas que consumen alimentos de origen vegetal, pero que también comen carnes, pescados, mariscos y aves ocasionalmente. 
  • Lacto-ovo-vegetariana: se caracteriza por la inclusión de leche y huevos en la dieta vegetariana estricta. También en esta dieta se pueden añadir alimentos que no sean de carne animal. 
  • Ovo-vegetariana: a diferencia de las dos anteriores, en esta dieta no se consume nada de lácteos, carne y pescado, pero sí se consumen huevos. 
  • Api vegetarianismo: en esta dieta solo se permite la miel como producto de origen animal, evitando así el consumo de los huevos, los lácteos y sus derivados. 
  • Pollotarianismo: su propio nombre nos puede dar un indicio del tipo de alimento que se puede consumir en este tipo de alimentación, y es el pollo, exclusivamente, evitando otros tipos de carnes (buey, caballo, cerdo…). 
  • Pescetarianismo: es muy parecida a la anterior, con la diferencia de que es una alimentación basada en plantas, pero que además las personas pueden alimentarse de marisco, pescado, lácteos y huevo.

Conociendo la dieta vegetariana equilibrada

Anteriormente, hemos hablado de los orígenes del vegetarianismo y de sus tipos, pero ¿cuáles son las características de una dieta vegetariana equilibrada? Como ya se sabe, una buena dieta vegetariana debe contener entre sus alimentos principales fruta, verdura, grasas saludables y proteínas. Y, además de esto, debe contar con una serie de características que la conviertan en algo exquisito. Dichas características son:

  • Idoneidad: hace referencia a las personas con necesidades nutricionales diferentes y cuya alimentación debe ser paralela a ese tipo de necesidades.
  • Racionalidad: se entiende como la modificación de proporciones de alimento para favorecer una alimentación variada. 
  • Variedad: se deben variar los alimentos de cada grupo alimentario, ya que lo que se busca es encontrar una diversidad nutricional. 

Pero una dieta, aparte de ser equilibrada, también debe ser saludable, y para ello debe contar con las siguientes características:

  • Satisfactoria: agradable y placentera desde el punto de vista sensorial.
  • Suficiente: debe cubrir las necesidades energéticas.
  • Completa: debe contener todos los nutrientes necesarios para el organismo. 
  • Equilibrada: no debe haber excesos ni de nutrientes ni de energía.
  • Armónica: los macronutrientes que la integran están en equilibrio. 
  • Adaptada: debe adaptarse a las características individuales de cada persona (situación fisiológica o fisiopatológica).
  • Sostenible: que no contribuya mucho con el cambio climático. 
  • Asequible: que se asequible económicamente para el individuo y que, además, permita la interacción social y la convivencia en los grupos.